viernes, 29 de junio de 2007

Influencia Entomófila sobre los Pastizales en el Estado Zulia.



Fuente:Revista de la Facultad de Agronomía (LUZ) 2(2):27-38
El Estado Zulia, se considera en el campo agropecuario como Una entidad eminentemente ganadera, calculándose que 2.000.000 de hectáreas están cubiertas de pastos. Diversos son los problemas de carácter entomológico que afectan la producción agropecuaria. El bachaquito de los pastos (Acromyrmex landolti FOREL) puede considerarse actualmente la plaga más importante en las haciendas ganaderas. La especie, debido al incremento intensivo de las áreas sembradas de pastos y a las limitaciones para el uso de ciertos insecticidas, se ha propagado peligrosamente, muy especialmente en las áreas ubicadas al Oeste del Lago de Maracaibo, donde las condiciones de suelo y clima favorecen su incremento. Esta especie construye sus nidos, generalmente individuales, al pie de la macolla del pasto Guinea (Panicum maximum), que es su hospedera. Severas infestaciones señalan poblaciones teóricas de unos 6 millones de individuos por hectárea, llegando a contarse 40 y más bachaqueros por cada 100 m2 de potrero, con un promedio aproximado de unos 1.500 individuos por nido. Construyen sus nidos hasta una profundidad de unos 1.20 m., con tres hongueras en posición vertical unidas por un pasadizo. La entrada está protegida por una construcción cilíndrica en forma de torrecilla, hecha de palitos y ramitas entrecruzadas, muy peculiar, la cual parece servir para impedir la penetración del agua de lluvia. Estas torrecillas tienen unos 5 cm. de altura y 3 cm. de diámetro, pudiendo existir varias colocadas juntas. Los bachaquitos pertenecen al grupo de las "hormigas jardineras", es decir que los insectos cultivan un hongo que les sirve de alimento. Este grupo de insectos está restringido al nuevo mundo y se les incluye en la tribu Attini. La especie A. Iandolti tiene individuos polimórficos, con el cuerpo pubescente y con abundantes tubérculos. Esta especie no posee casta ofensiva, observándose pasividad en los mismos, aun cuando se les moleste. Los insectos cortan el follaje laminar en su extremo, ocasionando defoliación del pasto, cambian la estructura del suelo, dificultando el proceso de absorción y pueden también afectar el sistema radicular directamente. En potreros infestados los pastos al llegar el verano se secan prematuramente y mueren siendo reemplazados por la maleza. En estos potreros el ganado lechero se moviliza y gasta más energía buscando zonas libres de insectos. Se concluye al confirmarse que la especie es un insecto sumamente perjudicial para la ganadería zuliana, ya que unas 500.000 hectáreas se encuentran afectadas j acentuándose cada vez más el incremento del mismo en las nuevas áreas deforestadas, especialmente al Sur, Este y Oeste de la población de Machiques, las cuales en la actualidad están sometidas a un peligroso proceso de infestación. De no determinar métodos adecuados de combate, la ganadería en las áreas afectadas podría convertirse en explotaciones antieconómicas y llevar a la ruina a sus propietarios.


COMENTARIO PERSONAL: La producción de Pastos en el Sur del Lago de Maracaibo, obecdece al demnda constante de explotacíón ganadera doble propósito que le brindan las condiciuones edafoclimáticas típicas de la Zona siempre y cuando se manejen los patrones genéticos adecuados; es bueno destacr que la Producción Agropecuaria está orientada a la evaluición operativa del área agrícola y pecuario, es muy común asociar daño de insectos con cultivos de plantación o de ciclo corto, pero resulta que los pastizales se ven afectados considerablemente por órdenes de insectos específicos que cumplen su cliclo de vida así como sus hábitos en los ecosistemas ofrecidos por los Pastos, estos insectos en su mayoría ejercen sus daños en etapa de larva defoliando rápidamente el follaje de las plantas perjudiaándolas poniemndo en riego la oferta forrajera que necesita la unidad de explotacuión para alimentar a los animales, esta slarvas en general aparecen a la salida de los picos lluviosos de la zona donde se debe estar prevenido y ejecutar los correctivos correspondientes.

Br. María Sánchez
CI. V-15.234.441

CONTROL BIOLÓGICO







El área de la Agropecuaria Aplicada, en los últimos años ha avanzado significativamente en cuanto al manejo y utilización eficiente de los Recursos Naturales presentes en las Unidades de Explotación con el objeto de ejercer actividades agrícolas con el menor impacto ambiental posible ó en algunos casos reducir los costos de mantenimiento de la Finca.

Actualmente se vive en una época donde el impacto ambiental es realmente grave debido a la utilización indiscriminada de herbicidas, fungicidas y sobretodo insecticidas, han permitido abrir nuevos mecanismos de trabajo para el control de plagas y enfermedades que afectan directamente a los Cultivos establecidos. El llamado “Control Biológico” parece ser una alternativa de gran envergadura al momento de organizar planes para el manejo integral de las plantaciones.

El Control Biológico, ofrece un número importante de ventajas como: fácil manejo, no existe impacto ambiental alguno, se trabaja con enemigos naturales, existe una variedad de presentaciones para la aplicación de los productos, etc., sin embargo y desde luego tiene sus desventajas: Aún no existe un amplio mercado abastecedor de los insumos, en algunos casos resultan muy costosos, su efecto es tardío, entre otros aspectos que delimitan la utilización de productos biológicos.
El cultivo masivo de los insectos entomófagos tiene los siguientes propósitos:
1. Estudiar a los insectos mismos para determinar con más precisión aspectos sobre sus hábitos, ciclo biológico y relaciones con el huésped.
2. Proporcionar grandes números de individuos para hacer liberaciones en el campo .y facilitar su establecimiento.
3. Estar en condiciones de ampliar la distribución de una especie previamente introducida o nativa.
4. Contar con una fuente de insectos entomófagos para liberarlos cada cierto tiempo en áreas donde el huésped ha escapado a su control.

Tomando en cuenta estas consideraciones queda de manos de la Asistencia Técnica y del Productor definir el Plan Sanitario que ofrezca las mejores opciones para la producción pero al beneficio en lo posible del ambiente.
Gaudys Hernández
CI. V-16.039.366

jueves, 28 de junio de 2007

me parece interesante

Hernandez Gaudys
C.I:16.039.366
Proyecto financiado por la Organización de la Salud (O.P.S.).
Trabajo publicado en los Proceedings de II Simposio Internacional Sobre Flebotomitos, realizado en Mérida, Venezuela.

La eficacia de cortinas impregnadas con deltrametrina contra flebótomos endofílicos fue evaluada en estudio de campo en el Edo. Táchira, Venezuela. Las cortinas impregnadas con concentraciones de 0,062, 0,25, 0,50 y 1.0 g/m2 fueron evaluadas en una carpa trampa con un atrayente luminoso. Se demostró que la cortina impregnada con la concentración de 1g/m2 tiene un significativo efecto de barrera contra especies de lutzomyia. Además se encontró una alta actividad insecticida (Tasa de mortalidad 24 horas después de contacto) de 95.5% y una reducción de picada (23.6) en las cortinas tratadas con esta concentración. Estos efectos permiten proponer a la cortina impregnada en concentraciones de 1g/m2 como alternativa efectiva para el control de vectores de leishmaniasis.

miércoles, 6 de junio de 2007

darwin pineda

El género catasticta fue descrito por Butler en 1870. Presenta la mayoría de sus especies en la región neotropical, en lugares templados y fríos de las montañas. En relación con las especies que existen en México, Godman y Salvin (1887- 1901), en la Biología Centrali- Americana y Rober in Seitz (1908- 1909), registran las mismas especies. En 1940, Hoffmann en su catalogo, consideró tres especies para México: C. Flisa H. S., C. Nimbice Bdv. Y C. Nimbice Ochracea Bates y Teutila Doubleday. En 1972, Reissinger publicó un artículo sobre la taxonomía y sistemática del género catasticta, en cual propone una serie de cambios, así como la descripción de algunas especies "nuevas", varia de las cuales muestran grandes diferencias, al grado de no ilustrar los adultos ni los genitales de los machos. * Laboratorio de Entomología, Departamento de Zoología, Instituto de Biología, UNAM, México. En 1975, Beutelspacher registró para las Minas, Veracruz, las mismas especies señaladas por Hoffmann, excepto C. Ochracea (Bates) y, el mismo autor en 1980, en su libro sobre "Mariposas Diurnas del Valle de México", registra C. Nimbice y C. Teutila mencionando por primera vez la planta de la cual se alimentan las larvas: phoradendron velutinum "Muérdago" (Fam. Lorantáceas). En 1977, González y Velázquez, describieron una nueva forma de C. Flisa y, en ese mismo año, Maza, describe una nueva forma femenina de C. Teutila. Beutelspacher en 1983, registra por primera vez a C. Nimbice para el estado de León, y finalmente, el mismo autor en 1984, describe una nueva especie de género: C. Oaxaca. Como resultado del estudio de los piérdeos mexicanos, durante la elaboración del fascículo II de la Mariposas de México, consideramos conveniente definir el estado actual que guardan las especies de catasticta en México, a la vez que se describe una subespecie nueva de C. Teutila y se consideran nuevos sinónimos para otras especies. Finalmente, se incluye una clave para la separación de las especies que vuelan en México.
OBSERVACIONES: Reissinger, en 1972, consideró erróneamente que lo que existía en México, correspondía a C. Bithys Reakirt y, por otra parte, describió a C.flisa avinoffi como una nueva subespecie procedente del centro de Veracruz. Asimismo, describió a C. Flisandra y C. Flisella, como nuevas especies, con base en material proveniente de Guatemala. Dicho articulo, carece de ilustraciones, sin embargo, al tener fotografías a color de "tipos", concluimos sin lugar a dudas, que corresponde a las formas de C. Flisa (H. Sch) siendo C. Flisella Reissinger, el nombre válido aplicable para la forma oscura con la serie de manchas blanquecinas muy reducidas y de bordes difusos, la cual por otra parte, fue descrita en 1977 por González y Velázquez, por lo que C. Flisella Reissinger, viene a ser el nombre válido para la misma. Considero que la aplicación de todos estos nombres, se debe a la variabilidad del tamaño de las manchas blancas, por lo que Jean H. Robert (com. Pers.) Han pensado en la posibilidad de que existan varias subespecies en México
variedad intraespecífica, por lo que hasta el momento no se ha descrito formas.

miércoles, 16 de mayo de 2007

PEDRO PEÑA

Parasitoides

La mosca de la fruta del Mediterráneo, la famosa moscamed o medfly
Existe en entomología un concepto llamado "parasitoidismo". Un parasitoide es un insecto que depreda o parasita a un insecto de otra especie, inyectando sus huevos dentro del cuerpo de su huésped para que, al eclosionar, sus larvas lo devoren, usualmente vivo. Los insectos que someten a sus parientes a esta suerte de horrible muerte comiéndoselos en vida suelen ser moscas o avispas, y son tan pero tan eficientes que han logrado incluso sincronizar sus ciclos vitales con los de sus infortunadas víctimas. Algunas, incluso, no parasitan a otros insectos adultos, sino a sus huevos, larvas o pupas.
Hoy en día, los entomólogos utilizan algunos parasitoides para aniquilar a otros insectos que, a su vez, destruyen los frutales. Guerra biológica en su estado puro. Parasitoides a favor del Hombre.
Uno de los más perversos destructores de cultivos es la perversa mosca de la fruta del Mediterráneo (Ceratitis capitata, llamada medfly o moscamed por sus enemigos). Por razones no establecidas, la medfly emigró, a fines del siglo XIX, desde su hábitat natal en el África Oriental hacia prácticamente todos los países tropicales y subtropicales del mundo, con especial énfasis en la cuenca mediterránea, donde se dedicó a devastar los frutales.
La medfly fue descubierta en los frutales de Hawaii en 1910, y los gravísimos daños que causó forzaron a los campesinos hawaianos a formar un consorcio que decidió enviar al entomólogo Silvestri al África a recolectar algunos insectos parásitos de capitata a efectos de colocar a la malvada mosca bajo un estricto control de sus enemigos naturales, completamente ausentes de las islas del Pacífico.
Fopius arisanus, enemiga de la moscamed

Para el año 1918, cierto número de parasitoides provenientes de varios países habían sido establecidos artificialmente en Hawaii. En ese entonces, a la medfly se había sumado la mosca de la fruta oriental (Bactrocera dorsalis Hendel) como depredadora de los cultivos hawaianos.
Más o menos entre 1961 y 1987, el más salvaje depredador de medfly y mosca oriental había probado ser el parasitoide Fopius arisanus Sonan. Aunque arisanus disfruta devorando a las crías de medfly, se trata de un parasitoide asiático que fue encontrado por primera vez en pupas de la mosca oriental. De hecho, los parasitoides utilizados en aquel entonces para controlar a la medfly eran en su totalidad parásitos de la mosca oriental.
La falta de parasitoides "verdaderos" de la medfly no se debía a la falta de candidatos, sino a la dificultad técnica de exportar millones de insectos vivos desde el África a los países más afectados por la mosquita, como los de Centroamérica o el propio Hawaii. Los científicos comenzaban a pensar que capitata no tenía ningún himenóptero parasitoide propio, y que siempre iban a tener que conformarse con los de otras mosquitas.
Todo ello iba a cambiar en 2000, cuando una investigación llevada a cabo en Kenya descubrió 10 especies de parasitoides en el interior de pupas o huevos de medfly.
Otra avispa parasitoide mostrando el ovopositor con el que inserta sus huevos en la víctima
Dos especies de parasitoides recientemente descubiertos, Fopius ceratitivorus (nombre adecuado si los hay) Wharton y F. Arisanus, son parasitoides ovopupales, es decir, que alojan a sus huevos tanto en los huevos como en las pupas de medfly. Esta característica otorga a ambas, y especialmente a ceratitivorus, el atractivo adicional de ampliar el espectro temporal en el cual pueden parasitar a medfly, es decir, si encuentran huevos los parasitan, y si los huevos ya han pasado al estado de pupas, pues también.
Wharton descubrió a ceratitivorus en las plantaciones de café de las aldeas de Ruiru y Ruirima, en Kenya, entre 1999 y 2000. Se trata de una pequeña avispa (como es usual), un himenóptero de la familia de los Bracónidos, que manifiesta una insaciable voracidad por poner sus huevos en el interior de los de la mosca mediterránea. Lo que hizo de inmediato el científico fue recolectar pupas de medfly infestadas de parasitoides, dividirlas en lotes de entre 4.000 y 23.000, y enviarlas por avión al Aeropuerto Internacional de Guatemala. Una vez formalizados los trámites aduaneros (imagínense las caras de los vistas de Aduana al informárseles de la naturaleza del cargamento), las pupas fueron llevadas en auto a las instalaciones de cuarentena del Centro de Investigación de la medfly en San Miguel Metapa.

Larvas de bracónido saliendo de la oruga huésped
Según el informe de Miguel López y John Sivinsky sobre el experimento, ya había parasitoides adultos en el embarque. En San Miguel se les suministró miel, agua, temperatura y humedades adecuadas, y se los mantuvo en suspenso hasta el momento de "presentarles" sus víctimas.

Carcasa vacía de una larva huésped. Obsérvense los orificiosprovocados por las larvas de avispa al salir
El largo órgano que penetra hacia abajo es el ovopositor
¿Cómo se hizo esto? Primero se permitió a muchas moscas del Mediterráneo que ovipusieran sobre granos maduros de café, según su costumbre habitual. Los granos infestados fueron "enhebrados" en forma de cadena y luego suspendidos verticalmente en las jaulas donde esperaban los famélicos parasitoides hembras (recién fecundadas por sus machos).
Los investigadores probaron ofreciendo huevos, pupas y larvas a las cerativora, y descubrieron complacidos que el parasitoide era capaz de destruir a las tres.
Avispas parasitoides poniendo sus huevos en una pupa huésped
El parasitoidismo de Fopius ceratitivorus sobre la medfly es tan eficiente, que desde entonces hasta 2002 la colonia de parasitoides produjo de 10 a 18.000 nuevos parasitoides adultos por semana, o, lo que es lo mismo, casi ¡tres de ellos por grano de café!
El nivel de parasitismo de la avispa sobre la mosca fue, en general, del 4%, con picos de hasta el 21%. Estos niveles son altísimos para insectos de este tipo.
Avispa penetrando a una ninfa con su ovopositor
Dados los resultados de los estudios, los entomólogos consideran que la introducción de los himenópteros del género Fopius en Hawaii y Guatemala son el mayor avance de la historia para el control de la mosca del Mediterráneo. Su capacidad de infestar tanto huevos como larvas es uno de los factores que los hacen tan eficientes, y se ha demostrado que si un competidor infesta larvas o pupas de medfly, Fopius comenzará a infestar huevos, ganándole la mano y erradicando en pocos días a todo competidor (junto con su víctima primaria).
Por supuesto que, para controlar a una mosca tan extendida geográficamente como medfly, será necesario que su parasitoide demuestre ser capaz de atacarla en una gran variedad de ambientes.
Los científicos opinan que si Fopius ceratitivorus logra esto, los días de la mosca del Mediterráneo en América Latina estarán contados.
Sanchez Maria
C.I: 15.234.441

Insectos y Ciencia - Completan el genoma de la abeja melífera

TEMAS: Biología, Zoología, Entomología, Insectos, Hymenoptera, Apidae, Apis mellifera
Con un mapa del código genético completo de la abeja de miel, científicos norteamericanos del Servicio de Investigación Agrícola (ARS) están buscando nuevas maneras para manejar la productividad de estos insectos cuyo nombre cientíco es Apis mellifera.
La polinización por la abeja de miel de más de 90 tipos de cosechas florecientes cada año resulta en mejoramientos en los rendimientos y la calidad que son valorados en más de 14 mil millones de dólares sólo en Estados Unidos, sin incluir la miel, el subproducto de la polinización.
Este mes un grupo encabezado por científicos en el Colegio Baylor de Medicina en Houston anunciaron la terminación del primer borrador del genoma de la abeja de miel, el cual es un décimo de la longitud del genoma humano.
Jay Evans y Katherine Aronstein, científicos del ARS que son miembros del grupo, ahora están usando información de este adelanto para identificar genes del sistema de inmunidad que ayudan a proteger la salud de las abejas de miel.
Actualmente, plagas de insectos, parásitos y enfermedades de las abejas de miel causan aproximadamente 5 millones de dólares anualmente en pérdidas en la polinización de cosechas.
Evans, un entomólogo en el Laboratorio de Investigación de las Abejas mantenido por ARS en Beltsville, Maryland, y Aronstein, una bióloga molecular en la Unidad de Investigación de las Abejas de Miel mantenida por ARS en Weslaco, Texas, califican los genes involucrados en resistencia potencial contra la bacteria Paenibacillus larvae, causante de una enfermedad en la larva del insecto.
Una posible solución tentadora es abaecin, una proteína pequeña que podría ser parte de la respuesta de resistencia a la infección loque en algunas abejas.
El mapa del genoma de la abeja también hará posible la identificación de marcadores genéticos para acelerar la crianza de abejas y mejorar su supervivencia durante el invierno; afinar las interacciones entre el huésped y el patógeno para controlar los organismos que causan enfermedades y realizar estudios basados en el genoma para afinar la nutrición y polinización de la abeja.
Por ejemplo, la localización de los genes olfatorios de la abeja de miel, hay posibilidad de que los investigadores puedan mejorar la dieta del insecto con suplementos o mejorar su habilidad de buscar néctar por más tiempo.
Gaudys Hernandez
C.I: 16.039.366

En el cuerpo de los insectos buscan cura para la sordera

Científicos que tienen como horizonte hallar soluciones a enfermedades auditivas humanas, encontraron claves en una especie de mosca. Mientras, otros exploran los pelos de las patas de los grillos considerados los detectores de ruidos más sensibles que existen en la naturaleza. El objetivo es emular los principios que lo explican para integrarlo al diseño de aparatos correctivos
Su pequeño cuerpo, formado por anillos y recubierto de una sustancia dura llamada quitina, está dividido en tres partes: una cabeza con una boca, dos antenas y ojos simples o compuestos, un tórax con tres pares de patas articuladas y a veces hasta cuatro alas y un abdomen. Poseen un esqueleto exterior y respiran por tubos llamados tráqueas.Representan más de la mitad del millón y medio de especies que conforman la familia del reino animal más numerosa, en la cual se engloban más de las tres cuartas partes de los animales que viven en nuestro planeta. Son los artrópodos, seres invertebrados cuyo cuerpo se halla dividido en segmentos enlazados. Existen unos mil millones de insectos por cada ser humano. Afortunadamente, están de nuestro lado. Y no sólo en un sentido metafórico, ya que algunas especies de estos diminutos vecinos de seis patas son unos valiosos aliados de la investigación.Científicos holandeses han logrado imitar los vellos de los grillos, considerados los detectores de ruido más sensibles de la naturaleza. Esperan que esto los ayude a descifrar el modo en que esos insectos perciben lo que les rodea y les sirva para diseñar implantes cocleares, con forma de espiral, a ser usados por personas sordas.Físicos de la Universidad de Twente, en Holanda, han hecho una réplica de los sistemas de las terminaciones capilares, llamadas “cerci” en los grillos, capaces de detectar las más pequeñas fluctuaciones en las corrientes de aire causadas por el aleteo de una avispa o el ataque de una araña.Según los estudiosos neerlandeses, "estos sensores son el primer paso hacia una variedad de aplicaciones importantes y hacia una mayor exploración científica"."Su tamaño pequeño y su ínfimo consumo de energía hacen que sean excelentes para aplicarlos en grandes redes sensoriales. Podrían utilizarse para visualizar el flujo de aire en el fuselaje de un avión", añaden los expertos. Ellos creen que estas estructuras podrían funcionar como plataforma para fabricar vellos que operen en fluidos como los del oído interno de los mamíferos.Grillos y moscasPero los grillos no son los únicos insectos que podrían ayudarnos a oír mejor. Otros científicos, en este caso canadienses, han comprobado que una variedad de moscas con un sofisticado aparato auditivo podrán ser muy útiles para idear equipos contra la sordera humana.Según los investigadores, la mayoría de las moscas no tienen oído, pero la parasitaria Ormia ochracea, posee un sofisticado aparato de audición tan sensible que es capaz de detectar la dirección del sonido en una amplitud de dos grados.Protección ante las abejasEn Australia, un equipo de investigación integrado por ingenieros de las universidades Griffith, ubicadas en las ciudades Brisbane, Monash y Clayton, han logrado programar el comportamiento de robots para que imiten el de las abejas, dejando una huella olfativa en los lugares por donde pasan. Actúan del mismo modo que los insectos que "marcan" con sus compuestos químicos las flores donde se han posado y libado, para no perder tiempo en volver a visitarlas. La utilidad de esta investigación estriba en el hecho de que ese sistema permitirá crear un robot podrá señalar la presencia de sustancias peligrosas en un área de una empresa para advertir a los trabajadores.La visión de la langosta es útil radar anticolisiónUna investigación efectuada en la Universidad de Toronto, Canadá, y publicada en la revista Nature ha descubierto que no sólo algún tipo de lechuza, gatos y humanos poseen un oído direccional.La mosca Ormia tiene también esta capacidad y la emplea para detectar a los grillos, a los cuales les implanta sus larvas. El oído de la mosca ha inspirado el desarrollo de nuevas tecnologías de audición direccional, más pequeñas y versátiles, las cuales permitirán, a quienes tengan una deficiencia auditiva, descifrar lo que dice una persona en una multitud. "El aparato auditivo de las moscas es notable si se tiene en cuenta que sus oídos están tan cerca, que la escucha direccional sería imposible en un animal", ha explicado el profesor de zoología y encargado del proyecto canadiense, Andrew Mason.Investigación profundaInvestigadores de las universidades de Oxford y Cambridge, en el Reino Unido, estudian las células nerviosas del sistema visual de las langostas, que evita que choquen entre sí, con miras al diseño de sensores anticolisión para sistemas de transporte y al control de los devastadores ataques de estos insectos. Cuando el alimento escasea y las condiciones meteorológicas son adecuadas, las langostas dejan su habitual existencia solitaria y forman enormes enjambres que devastan las cosechas. Los expertos han descubierto además que sus detectores pueden prever con exactitud la posibilidad de choque en vuelo, aunque el insecto se encuentre rodeado de muchos otros en un enjambre. Pero ese mismo sistema deja de responder a los estímulos cuando la langosta está sola y rodeada de uno o dos objetos. Entender por qué las langostas solitarias se convierten en gregarias puede ayudar a evitar que se formen enjambres devastadores, y comprender la plasticidad de su sistema visual serviría de ayuda para diseñar sensores de visión artificial que funcionen de modo distinto cuando cambien las circunstancias ambientales.